Serafín de la Vega, en su trabajo de investigación sobre la historia de Anjullón, se refiere a relatos de episodios bélicos que tuvieron como escenario el apacible pueblo: LA HORROROSA TRAGEDIA DE FUSILERIA DICTADA POR EL GENERAL LAVALLE EL 7 DE JULIO DE 1841.
En esa época se vivían jornadas sangrientas con el fin de consolidar los ideales republicanos surgidos en la Revolución de Mayo de 1810.
El autor, con ávida curiosidad investigativa, recurre a doña Concepción Díaz de Romero para que le hable de los episodios historicos vinculados a la época de la Organización Nacional que su padre, don Jacinto Díaz (fallecido en 1952 a los 102 años), sabía narrarlos.
De esta manera surge que: "Anjullón soportaba los duros embates de una época aciaga y sangrienta causada por las andanzas de la Montonera de los Llanos de La Rioja formada por guerrilleros de Facundo Quiroga y el Chacho Peñaloza, organizados para defender la Causa de Mayo que peligraba por la acción del gobierno despótico de la Santa Federación".
"Aquellos escuadrones montoneros tenían la consigna de luchar sin tregua por la defensa del ideario de mayo, pero ocurría que los soldados a veces traicionaban a sus propios jefes causando depredaciones en las poblaciones, saqueando y matando".
Don Jacobo de la Fuente, "caracterizado vecino y dueño de cuantiosa fortuna", era señalado por los montoneros como enemigo de la causa, y por tal motivo prepararon un asalto a mano armada a la casa familiar. Pero al anoticiarse de que se aproximaba la montonera, toda la familia huyó a la montaña, regresando cuando la patrulla se había alejado. Uno de ellos había quedado en el pueblo y fue fusilado por la patrulla del Ejército y Anjullón pasó a ser TEATRO DE LOS DESBORDES MONTONEROS.
Cuatro años después, un Escuadron de Caballería comandado por el general Lavalle, traía tres prisioneros espías: los Coroneles Franco, Guerrero y Villafañe que fueron fusilados en el pueblo.
Estos relatos fueron confirmados por don Pablo Serafín cuando cursaba estudios en la Primera Escuela de Periodismo dependiente de la Universidad Nacional de la Plata.
En los libros de Historia consultados en esa oportunidad encuentra que:
"El General Lavalle comandó la revolución unitaria que derrocara al Coronel Manuel Dorrego, fusilándolo; prosiguiendo la campaña contra Rosas, librando combates en diferentes lugares del país, y en tal circunstancia invadiera Anjullón, provincia de la Rioja, en el mes de julio de 1841".
"En la campaña emprendida por el noroeste de la República viajaba, desde Catamarca con rumbo hacia la Rioja, comandando el regimiento de Caballería, acompañado de su ayudante de campo el coronel Nicolás Barros, cuando al llegar al pueblo de San Antonio de Arauco, torciera la marcha en dirección al pueblo de Anjullón arribando horas después y conduciendo a tres prisioneros, los Coroneles rosistas: Franco, Guerrero y Villafañe, a los que mandara a fusilar horas después del arribo al pueblo. Sentencia que incluía al Fraile franciscano Nicolás Aldazos, accidentalmente en Anjullón, liberándolo por mediación de un amigo de Lavalle, llamándose Fermín Soaje".
"El General accediera al requerimiento de su amigo, exigiendo como única condición, que el sacerdote presenciara la ejecución de la sentencia para su escarmiento e inmediatamente el perdonado saliera de Anjullón con dirección a La Rioja donde poco después se conocía la noticia de su consagración como Obispo de San Juan".
Un dato para tener en cuenta: el lugar donde se realizó esta tragedia era el bañado de alfalfares de don Policarpo de la Fuente que vivía cerca de dicho sitio, sobre el camino que va de Anjullón a los Molinos. (¡Cuántas veces hemos pasado por allí sin saber de este acontecimiento!).
Siguiendo el relato de esta historia nos enteramos que Lavalle permaneció en Anjullón esperando refuerzos para su ejército que venían desde Catamarca al mando del General Mariano Acha, los cuales sufrieron el ataque sorpresivo del Coronel rosista José María Flores.
Al enterarse Lavalle, por la llegada de los sobrevivientes, que habían perdido 79 soldados, 25 oficiales, cargamentos y cabalgadura decide abandonar Anjullón y proseguir la campaña rumbo a Chilecito.
Estos episodios bélicos vividos en nuestro pueblo en épocas remotas rompieron la placidez de la vida pueblerina dedicada, sin duda alguna, al rudo trajín agropecuario.
Podemos decir entonces que Anjullón fue antesala de la República.
Todo esto pasó en Anjullón..? Y yo que creía que acá nunca paso nada.
ResponderEliminarGracias por darnos a conocer tantas cosas.
quiero conocer los apellidos de los habitantes de anjullon
ResponderEliminarHay muchos apellidos acá en el pueblo... no podemos hacer un listado. En algunas notas se mencionan algunos de los apellidos más tradicionales
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